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Foto: El País de España.

Una mirada al papel del banco central en la economía colombiana en el último siglo.

El Banco de la República celebró en 2023 su primer centenario. Esta es una de las instituciones con mayor reconocimiento y prestigio en el país. En estos 100 años siempre ha sido respetado por la manera eficiente y transparente como ha cumplido con su labor. ¿Pero a lo largo de su historia siempre ha sido exitoso en la labor que le corresponde a un banco central?; ¿es decir, en ser prestamista de última instancia de las entidades bancarias y darle estabilidad al sistema financiero y la moneda? En el contexto de América Latina es tal vez el banco central más exitoso de todos si miramos los indicadores de inflación, volatilidad del crecimiento, crisis financieras e inestabilidad cambiaria. Sin embargo, y como veremos a continuación, esto no quiere decir que en todos los su periodos hubiera sido igualmente exitoso. 

Para analizar la evolución del Banco de la República a lo largo de su historia es útil seguir una periodización que surge de dos variables: grado de compromiso con la estabilidad de los precios y si era independiente del gobierno o no. Con estos criterios encontramos cuatro etapas: 1) 1923-1950: compromiso con estabilidad de los precios (hasta 1931 por medio del patrón oro) e independencia. 2) 1951-1962: compromiso con la estabilidad de precios y además con el fomento del crecimiento económico. 3) 1963-1991: ni compromiso con la estabilidad de precios ni independencia, y 4) 1992-presente: compromiso con la estabilidad de precios e independencia. 

Los mejores resultados en términos de inflación los obtuvo el Banco de la República en los dos restantes sub periodos (1923-1950 y 1992-2022). En ellos hubo independencia y compromiso con la estabilidad de precios.

Cuando analizamos la inflación promedio en Colombia desde 1923, encontramos que el comportamiento en los cuatro sub periodos mencionados fue bastante distinto. Desde el punto de vista de la inflación promedio el peor resultado se observó en el periodo 1964-1991, cuando la inflación promedio fue de 19.8%. Esto fue el resultado de que en esa época la política monetaria estaba bajo la orientación de la Junta Monetaria, que ni tenia compromiso con la estabilidad de precios ni era independiente del gobierno. El segundo peor resultado se vio entre 1952 y 1963, cuando al Banco de la República le agregaron la función de promover el crecimiento económico. Para ello se crearon varios fondos (Agropecuario, Industrial) que repartieron créditos con grandes subsidios y que resultaron siendo inflacionarios. Aunque el Banco seguía siendo independiente ya no tenía un compromiso solido con la estabilidad de precios. La inflación promedio fue de 9.2%. 

Los mejores resultados en términos de inflación los obtuvo el Banco de la República en los dos restantes sub periodos (1923-1950 y 1992-2022). En ellos hubo independencia y compromiso con la estabilidad de precios. La inflación fue de 5.6% y 7.9%, respectivamente. Cabe resaltar que en los diez últimos años, 2013-2002, la inflación promedio ha sido de 5.4%, una de las más bajas de Latinoamérica. En gran medida este resultado favorable es fruto de la Constitución de 1991 que le otorgó independencia al Banco de la República, así como un  claro compromiso con la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda. 

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Adolfo Meisel Roca

Doctor en Economía de la Universidad de Illinois. Se desempeña desde 2019 como Rector de la Universidad del Norte en Barranquilla.

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