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El actor cartagenero Jhon Narváez debutó en 2018 en “Pájaros de verano”, filme de Ciro Guerra. En esta oportunidad interpreta a Joe Arroyo en “Rebelión”.

“Joe Arroyo sabía que era un genio, interpretarlo fue la experiencia más dura de mi vida”: Jhon Narváez

por | Feb 8, 2023

Por David Lara Ramos

Contexto dialogó con el actor cartagenero que interpreta al Joe en “Rebelión”, filme sobre la vida del cantante y compositor costeño.

La película Rebelión, del director colombiano José Luis Rugeles, se ha presentado como la historia íntima de un ídolo, pero la intimidad de un ser como el Joe sigue siendo tan oscura como inasible. También como la historia de un creador, pero el Joe de Rugeles carece de relato y el personaje se recrea en una seguidilla de instantes, en ocasiones,  reiterativos, en el que la música juega a favor del bailador, del espectador. Rebelión es, en últimas, un riesgo de autor, la decisión creativa de ubicar al protagonista en escenas de hoteles o ruinosas habitaciones urbanas, como la marca de la decadencia de una genialidad musical. Allí fluyen flashes biográficos de un creador atribulado, cuyos diálogos se afanan en humanizar al mito, con marcas patéticas en su discurso. 

El filme, cuidado en sus detalles técnicos y estéticos, carga el conflicto (el ruido) del referente real, y para los que no conocieron al artista, Rebelión será el mejor apoyo para iniciarse en otras formas del goce. En ese sentido, su director es coherente con su propia obstinación.

Protagonizada por el actor cartagenero Jhon Narváez, quien se echa la película al hombro como el mejor cotero del mercado de Bazurto, escena tras escena el protagonista pone sus hombros para suplir las carencias del relato. Al finalizar, uno tiene la sensación de que Jhon Narváez es un Tom Hanks en Náufrago o en Forrest Gump… Si lo preguntan, diré que Jhon Narváez es nuestro Joaco Phoenix en el Joker. 

David Lara Ramos:¿Cómo se concretó el papel de Joe Arroyo, tu primer protagónico? 

Jhon Narváez: Después de mi papel en Pájaros de verano, filme de Ciro Guerra y Cristina Gallego, todo el mundo me decía: “Nojoda, tienes que hacer un protagónico”. Sabes cómo es la gente. Luego, el 11 de marzo de 2020, me llamó Andrés Tudela y me preguntó si yo sabía cantar, y le dije de una: “claro”. Hay que mentir cuando es necesario. Nos encontramos, llegó con su celular, comenzó a grabar y me dijo: “Canta”. Le dije: “No, no, espera, calma, eso no es así, tengo que preparar mi canción”. Preparé Dime por qué, (canta) Por qué razón dejaste/ aquel amor divino / aquellas ilusiones / dime cuál fue el motivo que encontraste/ 

D.L.R.: ¿Qué pasó con esa prueba? 

 J.N.: Después del casting me habían dicho que el papel era para mí, pero en marzo de 2020, debido al COVID, cierran el mundo. Me quedo entonces con la angustia generalizada de la pandemia y con mi propia angustia. Vivía arrendado, pedí un descuento, no me lo dieron; entregué el apartamento. No tenía casa, empecé a cuidar una casa a cambio de vivir en ella. Era una academia de música que tuvo que cerrar durante la pandemia. A comienzos de 2021, me escribe el actor Ramsés Ramos, y me pregunta: ‘¿Sabes cantar?’, ¡Mierda…! Le digo, claro que sí. y me dice: ‘Graba una canción y me la mandas’. Esa vez grabé Tumba techo. Luego Ramsés me pide que grabe una escena y se la mandé también. Me fui para Bogotá a hacer un capítulo para una serie. Esa semana, me llama Federico Durán, sabía quién era, porque es egresado de la Escuela Internacional de Cine y TV de San Antonio de los Baños, igual que yo. Me dijo: ‘Vimos tus videos, nosotros estamos haciendo una película sobre el Joe Arroyo’, y me organizó un encuentro con el director, al día siguiente. 

 

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Con su estilo desabrochado y bacán, Jhon Narváez conversó con Contexto. Foto: David Lara Ramos.

¿Cómo fue ese encuentro con el director?, ¿cuándo te llamaron para decirte que el papel era tuyo? 

El director me decía que estaba buscando a una persona que cantara como el Joe, una voz altísima y yo soy bajo. Me pone a cantar ‘Noche de arreboles’ y me pide que represente una escena en la que muere una hija mía. Dice entonces que le gustó mucho, pero que le preocupa mi canto. Al final se despide y me la tira plena: “Voy a ver a otro actor ahora en la tarde, cualquier cosa te llamo”. Finalmente me pide que prepare tres canciones. Llamé a Noelia Castilla, que era la profesora de canto de la academia que cuidé durante la pandemia. Noelia me dio las clases. Ahí me di cuenta que enseñar es realmente empoderar. Ella me escuchó y me dijo, tú eres cantante. Ella misma me grabó las tres canciones y las mandó. A comienzos de febrero de 2021 Federico Durán, me da la buena noticia, el papel era para mí.  

¿Cómo fue tu preparación para construir ese Joe Arroyo que el director imaginaba?

Mucho estudio del personaje real. Seguí con mis clases de canto con Noelia. Me dediqué a adelgazar, pesaba 76, no tenía sobrepeso, pero el director quería que estuviera más flaco para las escenas con la orquesta que estoy sin camisa, así que me dediqué a hacer mucho ejercicio, hice una lista de alimentos tóxicos, llegué a 72 kilos. 

¿Hablaste con personas cercanas al Joe?  

Eso fue algo lindísimo, descubrir cómo los músicos, los amigos cercanos, hablaban de él. Sin duda lo más transformador fue el encuentro que tuve con Mary, el amor del Joe, y sus hijas Eikol y Nayalibe. Recuerdo que entré de último a la reunión, cuando Mary me vio, el saludo de ella fue: “Bendecido Jhon, bendecido”, era como si la familia y el Joe mismo, me dieran la bienvenida a la vida de ellas. Algo genial, muy íntimo. Casi al final de ese encuentro virtual, le dije a Mary: “Joe sabía que era genial”, porque uno conoce un montón de gente que posa de genial, pero vale tres tiras… y hay un montón de genios que no se la creen. Mary me dice: “Jhon, es que él se tenía una fe”. Eso fue lo que el personaje me regaló a mí, la convicción de que soy tremendo actor.

“El Nene” del Real llegó al colegio y escuchó a un pelao cantar en la iglesia. Quedó tan impresionado que le contó a su mamá: “Eeerda mami, allá en el colegio vi hoy a un pelao, erda mami, genial, que voz, espectacular”. Ese pelao era el Joe Arroyo. 

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Póster del filme dirigido por el director colombiano José Luis Rugeles.

Y con el Joe, ¿estuviste cerca de él en algún momento?

Fui a su entierro. En Cartagena no estaba pasando nada, absolutamente nada. Barranquilla parecía Buenos Aires luego del Mundial 2022. La plaza de La Paz repleta, la ciudad volcada a la calles viendo pasar el féretro del Joe. Mira tú, y el carro de bomberos se detuvo frente a mí. Yo salté, saludé a la esposa del Joe, y ella me agradeció profundamente por venir. Fue la muestra de amor verdadero de una ciudad que amó al Joe. 

¿Qué otras búsquedas hiciste para construir a ese Joe de Rebelión?

Vi casi todo lo que encontraba de él. La entrevista del Maca (Ernesto McCausland), genial, porque él era un periodista que se acercaba a estos personajes con tanta sinceridad, tranquilo, y los personajes le devolvían eso. Lo principal de esa entrevista es que Joe estaba tan en confianza con el Maca, que era él, eso fue valioso. Me sentía como él, dirigiendo esa orquesta, diciendo cómo tenía que sonar el trombón, así cómo el Joe lo hizo en el tema ‘Pa’l bailador’. Veía, al levantarme, un concierto del Joe producido por la BBC de Londres. Joe en su mejor momento. Eso me ayudó a entender al artista, a sentirlo, a vivirlo como cantante. 

 

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El filme es también protagonizado por la actriz costeña Angie Cepeda, quien interpreta a Mary, musa del desaparecido cantante cartagenero.

¿De esas búsquedas hay algo que te siga impactando sobre la vida del Joe? 

El rodaje de Rebelión comenzó en abril de 2021, el mismo mes que murió Víctor “El Nene” del Real, quien descubrió al Joe Arroyo. Ellos estudiaban en el mismo colegio, el Santo Domingo, donde hoy está el Centro de Formación de la Cooperación Española. “El Nene” cuenta que llegó al colegio y escuchó a un pelao cantar en la iglesia. Quedó tan impresionado que le contó a su mamá: “Eeerda mami, allá en el colegio vi hoy a un pelao, erda mami, genial, que voz, espectacular”. Ese pelao era el Joe Arroyo. 

¿Cuándo viste la película por primera vez? ¿Qué sentiste? 

Fue en el Bogotá Audiovisual Market, una gala privada en 2022. Me quedé en silencio, no pude hablar con nadie, ni con el director. Quedé realmente impactado porque yo en Pájaros de verano actúo diez minutos, aquí estuve una hora y media. Eso para mí fue muy duro, verme en diferentes facetas. Yo mismo lloraba como parte del público, fue tremenda esa experiencia porque a mí me gusta ir a ver películas, y luego de ver Rebelión quedé en shock. Además, fui la última persona en llegar a la película, ya ellos tenían todo armado, con actor principal, solo que el vale (el actor) no podía en ese momento y entonces aparecí yo, es decir estuve a un paso de no ser el Joe.

 

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David Lara Ramos

Escritor y periodista barranquillero, reportero gráfico. Abogado. Director del programa de Comunicación Social de la Universidad de Cartagena. Autor de los libros El dolor de volver y Pasa la voz, queda la palabra. Es editor de crónicas de la revista abisiniareview.com de Argentina. Vive en Cartagena.