Crónica breve de uno de los capítulos más sangrientos y decisivos, pero menos estudiados, de nuestra Independencia.
Para mediados de 1820 Simón Bolívar llegó a Barranquilla y se reunió con el coronel Mariano Montilla y demás comandantes que operaban en la zona del bajo Magdalena, para instruirlos sobre sus prioridades para la liberación de las provincias del litoral: el primer objetivo era asegurar el control del río Magdalena; segundo, ocupar la ciudad de Santa Marta y su provincia; luego, bloquear la ciudad de Cartagena y, por último, lanzar la campaña contra Maracaibo.
La ofensiva final para tomarse Santa Marta, implicaba derrotar primero a los realistas apostados en las poblaciones de La Fundación, Puebloviejo y La Ciénaga. El ataque contra Santa Marta debía ser por todos los frentes: los coroneles Lara y Carreño penetrarían a la provincia por el lado occidental, a la altura de Guaimaro, a orillas del río Magdalena. El coronel Carmona lo haría por el sur, por Tamalameque y Chimichagua. Los coroneles Córdova y Maza por el río Magdalena, luego de la liberación de Magangué y Mompox. El almirante Brión bloquearía la bahía de Santa Marta y el coronel Padilla ocuparía la Ciénaga.
El coronel Carreño asumió el mando sobre el Ejército Libertador del Magdalena y con su tropa cruzó el río Magdalena, mientras el coronel Padilla se internó en la provincia por los caños de la Ciénaga. El brigadier español Sánchez Lima fue al encuentro de las fuerzas patriotas. El 30 de octubre hubo un combate en el río Fundación y otro en el sitio de El Codo, ambos favorables a los patriotas. Luego de algunos días de descanso para atender a los heridos, Carreño y su tropa avanzaron hasta Ríofrío, donde los patriotas de nuevo vencieron a los realistas.
Ante la derrota de los realistas en Ciénaga, el gobernador de Santa Marta envió unos emisarios al coronel Carreño, para acordar su retirada. Carreño aceptó que las tropas realistas evacuaran la ciudad con destino a Cuba, siempre y cuando dejaran sus armas y pertrechos. El 11 de noviembre de 1820 entraron victoriosas a Santa Marta las tropas libertadoras. En esta ocasión, ni los catalanes de Santa Marta, ni los indígenas de Mamatoco opusieron resistencia.
A mediados de 1820 Simón Bolívar llegó a Barranquilla para planear la liberación de las provincias del litoral.
Carreño había acordado con Padilla atacar conjuntamente la población de Ciénaga el 10 de noviembre: de un lado Padilla empezó el ataque con sus buques menores, ocupó las baterías de la Barra y Puebloviejo, y envió una escuadrilla al mando del capitán Chitty para continuar el bloqueo de la bahía de Santa Marta, donde se encontraba el almirante Brión. Carreño también avanzó y los combates más feroces ocurrieron en “Mundo Nuevo”, cerca del cementerio de Ciénaga, el 10 de noviembre de 1820.
Esta fue una de las contiendas más sangrientas de la Independencia de la Gran Colombia, al dejar en el campo de batalla cerca de 700 muertos, la mayoría indígenas que luchaban del lado realista. Si se mide por el número de bajas, la Batalla de Ciénaga se ubica después de Ayacucho, pero por encima del Pantano de Vargas, Carabobo, Junín, Bomboná y Boyacá.
Ante la derrota de los realistas en Ciénaga, el gobernador de Santa Marta envió unos emisarios al coronel Carreño, para acordar su retirada. Carreño aceptó que las tropas realistas evacuaran la ciudad con destino a Cuba, siempre y cuando dejaran sus armas y pertrechos. El 11 de noviembre de 1820 entraron victoriosas a Santa Marta las tropas libertadoras. En esta ocasión, ni los catalanes de Santa Marta, ni los indígenas de Mamatoco opusieron resistencia.
En síntesis, esta fue una de las batallas más sangrientas y decisivas de nuestra Independencia, pero así mismo una de las menos estudiadas. Por lo anterior, el Banco de la República y la Universidad del Magdalena, con el apoyo de instituciones como la Academia Colombiana de la Historia y las Alcaldías de Ciénaga y Santa Marta, hemos organizado el Seminario virtual «Bicentenario de la Batalla de Ciénaga, 1820-2020: llave maestra de la Independencia de la Provincia de Santa Marta», a realizarse los días 10 y 11 de noviembre de 2020.
Joaquín Viloria De la Hoz
Doctor en Historia de la Universidad Autónoma de Puebla, México. Desde 2010 es el Gerente del Centro Cultural del Banco de la República en Santa Marta. También se desempeña como profesor catedrático de Historia Económica de Colombia e Historia Económica del Caribe Colombiano en la Universidad del Magdalena.