droga-ilicita

La Generación de 1928, conformada por un grupo de jóvenes venezolanos exiliados en Barranquilla que se propusieron combatir la dictadura de Juan Vicente Gómez.

La presencia de dictadores en Venezuela no es nueva y es buena parte de la historia de ese país en el siglo XX. En 1931, Barranquilla tuvo un rol protagónico en la lucha contra el dictador Juan Vicente Gómez.

Hace 90 años, el 22 de marzo de 1931, se suscribió en nuestra ciudad el llamado Plan de Barranquilla, documento de gran trascendencia histórica firmado por jóvenes venezolanos en el exilio pertenecientes a la denominada “Generación de 1928” entre quienes se destacan Rómulo Betancur, Raúl Leoni, Valmore Rodríguez, Ricardo Montilla, entre otros.

Raúl Leoni y Rómulo Betancourt eran dos jóvenes que estaban exiliados en Barranquilla luego de ser expulsados de su país. Leoni venía de República Dominicana y junto a otros activistas decidieron radicarse en Barranquilla donde fueron muy bien acogidos. Salomón Asmar da cuenta de un hecho poco conocido en la vida de Leoni: “Junto a su padre, Clemente Leoni, un francés casado con una guyanesa que arribó a Barranquilla un año después de la llegada de su hijo, abren un puesto de frutas en la esquina del Cañón Verde, frente a la Iglesia de San Nicolás, en el Paseo Bolívar” (El Heraldo, febrero 10 de 2019).

El Plan de Barranquilla proponía muy diferentes aspectos como la confiscación de bienes del dictador Juan Vicente Gómez, la exclusión de los militares en puestos públicos, la alfabetización a la población y autonomía universitaria, entre otros. Este plan se convertiría en una nueva acción contra la dictadura en Venezuela pues previamente ocurrieron múltiples eventos de repudio a dicho régimen que incluso condujeron al exilio a varios de sus protagonistas.

Un antecedente al Plan de Barranquilla ocurrió el 17 de diciembre de 1930 al conmemorarse los 100 años del fallecimiento del Libertador Simón Bolívar cuando se celebró en Caracas una gran manifestación popular en contra de la dictadura, con un saldo de varios muertos y heridos a tiros. Otro hecho previo al Plan ocurrió en 1918 cuando ingresó a Venezuela procedente de Colombia (por la región del Táchira) un contingente opositor comandado por el general Juan Pablo Peñaloza, quien posteriormente sería aniquilado. También estallaron protestas y paros entre los artesanos, obreros, y trabajadores del tranvía de la capital en 1921, respaldados por los estudiantes universitarios, lo cual condujo a que nuevamente se cerrara la Universidad Central hasta 1925. Los líderes estudiantiles Eduardo y Gustavo Machado o Francisco de Paula Laguado Jaimes hallaron refugio en Cuba, donde fundaron con Julio Antonio Mella la revista Venezuela Libre.

Posteriormente sicarios del dictador Gerardo Machado encarcelaron y arrojaron a los tiburones a Laguado Jaimes (marzo de 1929) por considerar que este era uno de los más activos opositores a su régimen. En contraste, otros opositores que se refugiaron en México tuvieron el respaldo del presidente Álvaro Obregón hecho que condujo a la ruptura de relaciones diplomáticas entre Venezuela y el gobierno mexicano en el año 1923. La protesta universitaria de 19282, pareció emular la revuelta estudiantil de Córdoba Argentina, ocurrida en 1918.

Un antecedente al Plan de Barranquilla ocurrió el 17 de diciembre de 1930 al conmemorarse los 100 años del fallecimiento del Libertador Simón Bolívar cuando se celebró en Caracas una gran manifestación popular en contra de la dictadura, con un saldo de varios muertos y heridos a tiros.

El periodo “gomecista” en Venezuela se inició con el derrocamiento del dictador Cipriano Castro quien gobernaba el país desde 1899. El golpe de Estado orquestado por Juan Vicente Gómez tuvo el apoyo de varios gobiernos europeos y los Estados Unidos ya que Castro fue un militar nacionalista que gobernó con mano dura frente a las pretensiones de varios países de atentar contra la soberanía de Venezuela.2 De hecho, el gobierno de Castro había roto relaciones diplomáticas con los Estados Unidos en junio de 1908 y meses después fue derrocado.

Una vez en el poder, Juan Vicente Gómez firmó en 1909 los protocolos Buchanan-Gómez, que aceptaban sin dudas todas las peticiones económicas de Estados Unidos a Venezuela, incluida la anulación de la indemnización a que había sido condenada por un tribunal venezolano la New York and Bermúdez Company. Podríamos decir que como un acto recíproco al joven gobierno venezolano, Washington impidió el regreso a Venezuela del recién depuesto dictador Castro, ante lo cual, sin recursos propios, debió deambular entre Madrid, Paris y Santacruz de Tenerife. Incluso a fines de 1912 intentó entrar a los Estados Unidos, ante lo cual fue maltratado en inmigración y obligado a marcharse en febrero de 1913.

La prolongada dictadura de Juan Vicente Gómez se explica por el auge de las exportaciones petroleras convertidas en el principal producto de exportación del país, lo cual condujo al debilitamiento de las clases dominantes, muchas de cuyas propiedades y haciendas fueron pasando a manos del dictador, sus familias y allegados. Gómez se convirtió en el principal latifundista del país como lo fueron en su momento otros dictadores latinoamericanos como Porfirio Díaz, Anastasio Somoza o Leonidas Trujillo.

El 17 de diciembre de 1935 falleció en ejercicio de su cargo Juan Vicente Gómez. Al igual que el dictador François Duvalier, dejó el poder solo con su muerte. Se calcula que su fortuna era más de cuarenta millones de dólares.3

Hubo también en la historia de Venezuela otra dictadura: la de Marcos Pérez Jiménez entre 1952 y 1958 luego de la cual los partidos tradicionales acordaron el Pacto de Punto Fijo4 (octubre de 1958) a fin de garantizar la transición a la democracia, incluyendo a todas las fuerzas políticas, a excepción del partido comunista.

Cabe señalar que varios de los integrantes de la llamada Generación de 1928 y artífices del Plan de Barranquilla fueron presidentes de Venezuela. En su orden, Rómulo Betancourt (1945-1948 presidente interino) y presidente constitucional 1959-1964 y Raúl Leoni (1964- 1969).
Mucha agua ha corrido bajo el río en Venezuela desde los años de las dictaduras de Juan Vicente Gómez y Marcos Pérez Jiménez. Aunque hoy este país sufre nuevamente las consecuencias de un régimen autoritario que reprime sin límites.

Ante la descripción de Enrique Krauze (en su libro El Poder y el Delirio, 2008) sobre Hugo Chávez de ser “un aprendiz de dictador, populista y palabrero”, seguramente en los libros de historia se definirá a Nicolás Maduro como el sepulturero de la democracia y el artífice de la debacle económica de Venezuela.

* Para el periodo de Juan Vicente Gómez, hemos tomado apartes del libro Dictaduras del Caribe, de Sergio Guerra Vilaboy y Roberto González Arana, Ediciones Uninorte, 2007.

1 Previamente, en el año 1912, el dictador Juan Vicente Gómez había cerrado por 10 años la Universidad Central de Caracas en respuesta ante protestas estudiantiles.

2 Entre diciembre de 1902 y enero de 1903 flotas de guerra conjuntas de Inglaterra, Alemania e Italia bloquearon durante dos meses las costas de Venezuela (Maracaibo, la Guaira y Puerto Cabello) para exigir al gobierno de Caracas la satisfacción de reclamaciones financieras, ante lo cual el presidente Cipriano Castro reaccionó de forma enérgica oponiéndose a sus pretensiones.

3 Guerra Vilaboy, Sergio, González Arana, Roberto, Dictaduras del Caribe, 2017.

4 Equivalente al Frente Nacional en Colombia. 

Roberto González Arana

Ph.D en Historia del Instituto de Historia Universal, Academia de Ciencias de Rusia. Profesor Titular del Departamento de Historia y Ciencias Sociales, Universidad del Norte.