Margarita Garcia

Foto: periódico El sol.

La calidad de la educación en el Caribe, un ‘paciente’ que requiere atención urgente

por | Jul 22, 2024

Por Observatorio de Educación del Caribe Colombiano

Aunque en aspectos como cobertura y reducción de la deserción escolar la región Caribe tiene resultados destacables, persiste el rezago en la calidad de la educación. Implementar políticas educativas enfocadas en cerrar las brechas existentes y elevar el nivel educativo, una tarea que no da espera.

El Consejo Privado de Competitividad (CPC) y la Universidad del Rosario presentaron por undécima vez consecutiva los resultados de su Índice Departamental de Competitividad (IDC) para los 32 departamentos del país y la ciudad de Bogotá.

El análisis, compuesto por 102 indicadores observables, se agrupa en los siguientes factores de competitividad: condiciones habilitantes, capital humano, eficiencia de los mercados, y ecosistema innovador. En el factor de capital humano se destaca el de educación básica y media, en el cual fueron analizados los grupos de indicadores cobertura y calidad de la educación, por parte  del Observatorio de Educación del Caribe Colombiano de Uninorte.

Al comparar el pilar de educación básica y media en los departamentos de la región Caribe con el resto de los departamentos del país y la ciudad de Bogotá, los datos revelan una considerable distancia entre los departamentos del Caribe y los mejor puntuados del país, como Boyacá (8,97), Santander (8,47) y Quindío (8,30). En la mitad del ranking se encuentran Atlántico, Bolívar y Sucre. Atlántico ocupa el puesto 15 con una puntuación de 7,07, aunque ha retrocedido dos posiciones respecto al año anterior. Bolívar ha mejorado, subiendo tres lugares hasta el puesto 17 con una puntuación de 6,62. Sucre se mantiene estable en el puesto 18, con una puntuación de 6,62.

El análisis del Observatorio de Educación precisa que en la parte inferior del ranking se sitúan Córdoba, La Guajira, Cesar y Magdalena. Córdoba se mantiene en el puesto 19 con una puntuación de 6,62; La Guajira subió tres posiciones hasta el puesto 25 con una puntuación de 6,62; Cesar está en el puesto 26 con una puntuación de 5,62, bajando un lugar respecto a 2023. Finalmente, Magdalena ocupa el puesto 28 con una puntuación de 5,44, subiendo dos lugares en comparación con el año anterior.

Al desagregar los indicadores del pilar, se destaca que en el ámbito de cobertura en educación, Bolívar, Atlántico y Sucre figuran en los puestos superiores del ranking. Bolívar ocupa el sexto lugar, con una destacada cobertura en educación primaria (9,50) que lo ubica de tercero a nivel nacional, aunque en preescolar (7,56) está en el puesto 14. Atlántico, en la novena posición, lidera en deserción escolar (7,78), pero presenta rezagos en preescolar (7,10), primaria (7,84) y secundaria (8,36), ocupando los puestos 17, 14 y 11, respectivamente. Sucre, en el puesto 13, sobresale en cobertura neta en primaria (8,28), ocupando el noveno lugar nacional.

La Guajira, Magdalena y Cesar se encuentran en los puestos inferiores de Cobertura en Educación. La Guajira ocupa el puesto 17, con una cobertura perfecta en preescolar y primaria (10,0), pero un bajo desempeño en secundaria (5,41) y media (3), ubicándose en los puestos 28 y 29; Magdalena, en el puesto 19, muestra bajos resultados en preescolar (6,73) y media (6,46), y en deserción escolar, ubicándose en el puesto 20. Cesar, en el puesto 24, presenta un rezago en preescolar (6,09), primaria (6,09), secundaria (6,87) y media (6,01), y una preocupante deserción escolar (4,34), en el puesto 26.

En cuanto a la Calidad en Educación, Córdoba y Atlántico tienen desempeños moderados: Córdoba está en el puesto 18 con buenos resultados en la relación estudiantes-docentes (puesto 12), pero en el puesto 21 en las pruebas Saber 11. Atlántico, en el puesto 20, destaca en el porcentaje de docentes con posgrado (puesto 8), pero tiene rezagos en la relación estudiantes-docentes (puesto 28) y en las pruebas Saber 11 (puesto 23). Sucre, Cesar, Bolívar, La Guajira y Magdalena se ubican en los puestos más bajos. Sucre, en el puesto 23, tiene bajos resultados en las pruebas Saber 11 (puesto 25) y en docentes con posgrado (puesto 25). Cesar, en el puesto 25, también muestra un desempeño pobre en las pruebas Saber 11 (puesto 24) y en docentes con posgrado (puesto 26). Bolívar, en el puesto 26, se encuentra en el puesto 29 en las pruebas Saber 11. La Guajira, en el puesto 27, y Magdalena, en el puesto 28, presentan bajos puntajes en las pruebas Saber 11 (puestos 27 y 28, respectivamente) y en el porcentaje de docentes con posgrado (puestos 28 y 27).

La Guajira, en el puesto 27, y Magdalena, en el puesto 28, presentan bajos puntajes en las pruebas Saber 11 (puestos 27 y 28, respectivamente) y en el porcentaje de docentes con posgrado (puestos 28 y 27).

Los resultados del Caribe en el Índice Departamental de Competitividad 2024 para el pilar de educación básica y media revelan una situación crítica que requiere atención urgente. “Aunque algunos departamentos han tenido resultados positivos en términos de cobertura y permanencia, especialmente en educación primaria y la reducción de la deserción escolar, la calidad de la educación permanece baja en casi todos los aspectos evaluados en este índice. La región necesita implementar políticas educativas focalizadas que aborden tanto la ampliación de la cobertura como la mejora de la calidad educativa para cerrar las brechas existentes y elevar el nivel educativo de todos los departamentos”, expresó Jorge Valencia Cobo, coordinador del Observatorio de Educación de la Universidad del Norte.

Considerando que una mayor presencia de docentes con posgrados tiende a estar asociada con mejores resultados académicos de los estudiantes, el análisis del Observatorio recomienda seguir fortaleciendo los programas territoriales de financiación de maestrías y doctorados para profesores del sector oficial, incluyendo criterios de calidad y pertinencia de los programas.

“Es necesario además analizar la distribución de la planta docente y diseñar estrategias de acompañamiento que permitan mitigar los impactos negativos de la gran cantidad de alumnos por salón sobre la práctica docente en el aula. Igualmente, se deben desarrollar programas de incentivos que atraigan a los docentes con la mejor formación a las instituciones que más lo necesitan”, afirma Valencia Cobo.

En Instagram y X: @oeccuninorte 

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