El teletrabajo y una permanente conexión por asuntos laborales a dispositivos tecnológicos que puede prolongarse en las noches y los fines de semana, le está pasando factura a los trabajadores colombianos. Foto: Tim Gouw. Unsplash.
Un estudio realizado por FTI Consulting indica además que 4 de cada 10 trabajadores del país se sienten bastante agotados. El trabajo en casa, el uso de la tecnología, jornadas de trabajo más intensas, y la falta de vacaciones, entre las principales causas.
Para César Pérez las semanas de trabajo se volvieron cada vez más agotadoras, monótonas y pesadas. Entre la ansiedad de querer cambiar de empleo y el miedo a contagiarse de COVID-19, transcurren los días de este auxiliar contable barranquillero que trabaja desde hace 3 años en una empresa de confecciones en el centro de la ciudad.
Por un lado, lo agobia el estrés de trasladarse diariamente en los abarrotados articulados del sistema de transporte masivo, en donde podría resultar infectado del virus; por el otro, la alternancia que realiza la empresa cada semana al modo teletrabajo, aumenta su carga laboral y lo obliga a ejercer sus funciones en el hogar, lugar que considera no apto para el trabajo.
Esta situación, según el joven de 29 años, le ha ocasionado pérdida de peso y ansiedad, viéndose obligado a acudir a un profesional de la salud para ser tratado con medicamentos.
¿Es el caso de César el reflejo de cómo se sienten los trabajadores colombianos? De acuerdo con un estudio denominado “Estamos agotados los colombianos”, realizado en enero de 2021 por FTI Consulting en cuatro ciudades principales del país, 4 de cada 10 trabajadores aseguraron sentirse bastante agotados y 7 de cada 10 consideraría cambiar de actividad si pudiera hacerlo.
Según el estudio, las principales causas del agotamiento están relacionadas con no poder desconectarse de la tecnología, tener jornadas de trabajo más intensas y no haber podido tomar vacaciones.
El mismo Ministerio de Salud y Protección social, informó que en el último año más de 11.000 colombianos han acudido a la línea 192 para atención psicológica en temas relacionados con el uso excesivo de la tecnología, estrés, monotonía y presiones de la vida diaria.
La investigación también refleja que el 42 % de las mujeres manifestó sentir un agotamiento mayor al de los hombres, cuyo porcentaje estuvo en 32 %. El estudio refleja que los encuestados, aunque están dedicando el tiempo adecuado a las actividades principales como trabajar, dormir, responsabilidades del hogar y tiempo de ocio, les hace falta tiempo para sí mismos. 7 de cada 10 aseguran que no tienen tiempo para compartir con la familia.
El mismo Ministerio de Salud y Protección social, informó que en el último año más de 11.000 colombianos han acudido a la línea 192 para atención psicológica en temas relacionados con el uso excesivo de la tecnología, estrés, monotonía y presiones de la vida diaria.
Cambio de paradigma
Para Ricardo Jaimes Céspedes, experto en coaching organizacional con más de 30 años de experiencia en el sector privado, los resultados de la encuesta de FTI Consulting son un reflejo del cambio de modelo en las formas de realizar las funciones laborales, las cuales hoy dependen mucho del uso de la tecnología y se han trasladado a espacios como los hogares.
El especialista explica que esta situación causa tensión y preocupación en el individuo al plantearle un reto mental y adaptativo. “Este cambio —detalla— se dio de manera acelerada y sin mucho tiempo de adaptación. Mientras ciertos individuos están dotados de buenos recursos internos y para ellos los cambios de entorno les pueden parecer retadores e interesantes, para otros, por el contrario, los cambios, desafíos y retos les pueden parecer una amenaza”, indica Jaimes.
La pandemia, sin duda alguna, también ha generado estrés y agotamiento laboral en los colombianos. Jaimes señala que, sumado a la desinformación, la confusión, los cambios de hábitos y comportamientos a nivel individual, social y laboral, existen otros elementos que pueden agravar el sentimiento de agotamiento de las personas como el miedo exagerado a lo desconocido, a perder familiares o a perder su fuente de empleo debido a la crisis económica.
“Esto puede llevar a los colaboradores de las empresas a sufrir trauma por estrés agudo y, de no manejarse adecuadamente, podría derivar a un trauma post traumático”, señala el experto.
¿Agotamiento mayor en los jóvenes?
El estudio indica además que los encuestados entre 25 y 35 años presentan un mayor cansancio que el resto de los consultados.
En opinión de Ricardo Jaimes, quien también es experto en cultura y clima organizacional y gestión del talento humano, es muy probable que la mayoría de jóvenes entre los 25 años esté ingresando al mercado laboral, por lo que no poseen suficiente experiencia en su cargo y en las herramientas que les permita afrontar y buscar soluciones efectivas a los desafíos, manejo de emociones y conflictos del ambiente laboral.
Para el experto, el afán de crecer en las organizaciones Vs. la escasez de oportunidades y las modalidades de contratación lleva a que los jóvenes se autoexijan por demostrar su talento, hecho que en ocasiones crea un choque de expectativas con los salarios y beneficios ofrecidos por las empresas. “Todo esto suma al estrés y les pasa a los jóvenes una cuenta de cobro emocional que se refleja en las empresas en índices como la rotación, ausentismos, desmotivación, falta de interés o incluso deslealtad”.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), con respecto a la salud mental en el trabajo, realizó algunas recomendaciones como fomentar la discusión abierta sobre la resiliencia y el autocuidado, reconocer signos como la tristeza excesiva, la desesperanza y la pérdida de interés en actividades, e incluso buscar ayuda psicológica cuando sea necesario.
Eduardo Patiño M.
Periodista de las secciones Ciudad y País de Contexto.